viernes, 4 de marzo de 2011

TODO LO QUE PIDA ESTÁ CONCEDIDO (Mc 11, 11-25)


Si tuviera la posibilidad de pedir todo lo que quiero, seguramente pidiría muchas cosas que creyendo que son buenas para mí, en el tiempo no son tan buenas porque todo aquello que no vaya en bien de conseguir la vida eternamente feliz es un fracaso terrible. Y de nada vale todo lo que haya tenido o disfrutado.

¿Entonces? Se trata de hacer y pedir aquello que realmente me conviene y es para mi bien. Y sabemos que todo aquello que comporta un verdadero bien para mí me exige esfuerzo y sacrificio. La salud exige disciplina, comer alimentos no tan apeticidos, cantidades moderadas que no satisfacen mi glotonería. Supone ejercicios físicos que exigen esfuerzos y constancia. Y no digamos el estudio, la formación, la licenciatura, la oposición...etc.

Todo en la vida, lo que realmente vale, cuesta esfuerzo. Pues, cuanto más costará alcanzar la plenitud de la vida eterna y gozosa. Porque es eso lo que realmente todos queremos alcanzar. Por eso luchamos y nos esforzamos todos los días. Pero no sabemos que es lo que nos conviene. Por un lado, estamos mediatizado por nuestra humanidad débil y pecadora, y nos atrae lo corrupto, las cosas de disfrute inmediato, lo cómodo y fácil.

Pero, por otro lado, sabemos que el camino estrecho, el sacrificio, la renuncia, el amargo sabor de las cosas buenas es lo que nos conviene y salva. Necesitamos a Alguien que nos ayude a elegir lo que verdaderamente necesitamos, y que nos de fuerza para llevarlo a nuestra vida. 

Sólo DIOS sabe lo que es bueno para nosotros, y todo lo que le pidamos en ese sentido nos será concedido, porque como PADRE Bueno que es nos dará lo mejor y lo que realmente nos salva eternamente.

PADRE, iluminarme para entender que
mi petición sea aceptar y desear
lo que TÚ quieras darme.

Porque lo TÚ me das es lo que necesito
para mi salvación y mi gozo eterno
junto a TI.

TÚ, has enviado a tu HIJO JESÚS para
salvarnos, y quieres que todos seamos
salvados. ¿Cómo no nos vas a dar
lo que necesitamos para ello?

Haz, SEÑOR, que comprendamos que
hacer tu Voluntad es pedirte y 
aceptar recibir lo que TÚ 
nos has dado. Amén.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Compartir es esforzarnos en conocernos, y conociéndonos podemos querernos un poco más.

Tu comentario se hace importante y necesario.